“¿Sigues comparando a todos los hombres con Dimtri, Anna?”
-Bésame.- dijo ella de repente, y le puso las manos en el pecho.-
Dame un beso, ¿quieres, Nikolay? - preguntó casi desesperada.
Ellos se habían besado cientos de veces antes, pero ésa sería la
más importante de toda su vida.
<< Sé el hombre que logrará hacer que le olvide.>>
-¿Qué? - Dimitri no podía haberlo oído bien. Era imposible.- Hay
algo que deberías saber... Yo nunca voy a casarme. Nunca.
-Tienes que casarte con ella.- insistió Vladimir.
-¿Estás loco? Ella ya está casada con Nikolay.
-Sí, pero puedo pedir un divorcio express de manera ilegal y si os
casais de inmediato ella no tendría que volver aquí y podrías
llevarla contigo.
-Eso también puedo hacerlo sin casarme con ella.
-No, Dimitri, tienes que...
-Tú sabes lo que soy ahora. Sabes lo que he hecho.- Era imposible
que Vladimir quisiera que su hermana se casara con un asesino con
el cuerpo destrozado y las manos manchadas de sangre.- ¿Cómo
puede ser que me elijas a mí para esta... misión? Además, tu
padre dudo que esté de acuerdo con todo esto, y no hablemos de
Nikolay.
-Precisamente porque sé lo que eres y lo que has hecho es por lo
que quiero que seas tú. ¿Sabes el mensaje que recibirá
cualquiera que quiera haceros daño cuando se entere de que os
habéis casado? No podrán tocaros. Mi hermana no podría volver aquí,
pero sé que sería feliz junto a ti.
-¿Aquí, Anna? - preguntó Nikolay nervioso mientras miraba a su
alrededor.- ¿Quieres que te bese aquí en el parque?
Anna asintió y se acercó a él.
-No nos ve nadie. - cogió a Nikolay del cuello y tiró de él. Por
fin sus labios encontraron los de ella.
No, besarse no era nada nuevo para ellos. Lo nuevo fue que Anna se
dio cuenta de que ese beso sólo hacía que sintiera como si alguien
le estuviera dando golpecitos cariñosos en la mejilla. La noche
anterior, sentir la mano de Dimitri en la suya había sido mucho más
excitante que aquello.
Decepcionada, Anna besó a Nikolay con más ganas, y tiró de sus
hombros para ver si así lograba que él hiciera algo más.
Necesitaba desesperadamente convencerse de que podía vivir sólo con
eso durante el resto de su vida. Mientras forzaba sus movimientos,
intentó recordar los libros que había leído, esos textos eróticos
que estaban prohibidos, y comprendió que entre un hombre y una mujer
había mucho más de lo que Nikolay le estaba dando. Había pasión,
deseo, ansias. Pero no con él...
El cuerpo de Nikolay fue apartado de ella y salió despedido hacia
el suelo.
Anna aturdida miró hacia arriba.
-¿Dimitri?
Adoro esta historia! Por cierto Mimí, te agradecería mil que me mantuvieses informada sobre cuando saldrá tu libro y demás. Muchas gracias!
ResponderEliminarCuando salga el libro!! Por favor escríbeme a mi correo para comprarlo bohemiaenamorada@live.com Porque la historia es buenísima, de verdad :)
ResponderEliminarSaludos!