Seguir · Mimí · eldesvandemimi@hotmail.com · Twitter · Revista

sábado, 31 de diciembre de 2011

#346

Alyssa se había ido a descansar un poco a casa, apenas habían dormido en 1 mes que llevaban allí. Dimitri estaba solo cuando las máquinas le anunciaron la destrucción de su propio mundo. Las máquinas que mantenían con vida a Evelyn comenzaron a sonar estrepitosamente. La pequeña pantalla donde hasta ahora su corazón había dibujado ondas, tenía ahora una línea recta.  Estaba muriendo. Una enfermera entró corriendo a la habitación.


-¡Mierda! - dijo mientras volvía a salir al pasillo y gritaba.- ¡Código rojo! ¡Código rojo! ¡Necesito un médico en la habitación 213!


Dimitri no hacía más que abrazar a Evelyn y rezar a Dios para que no se la llevara. La abrazaba con más fuerza que nunca mientras ella dejaba este mundo. No podía creer que ya jamás volverían a reír juntos, que no volvería a ver esa chispa en sus ojos grises. La sujetaba con intenciones de no dejarla ir, como si su abrazo pudiera salvarla, como si pudiera traerla de vuelta. No quería que se fuera para siempre, pues para siempre, es demasiado tiempo. No estaba preparado para decirle adiós, aunque jamás lo estaría.


Un equipo de médicos y enfermeras había entrado en la habitación y llevaban un buen rato intentado razonar con Dimitri para que les dejara hacer su trabajo, pero él no los escuchaba. Sólo podía escuchar aquel pitido continuo que se llevaba a Evelyn, a su Evelyn. Uno de los enfermeros lo agarró con fuerza de los hombros para intentar sacarlo de la habitación. Y hasta el último segundo, hasta la última milésima, incluso antes de que sus dedos no pudieran seguir sujetándose al marco de la puerta, esperaba, que aquella máquina enchufada al amor de su vida volviese a pitar con normalidad, que volviese a darle esperanzas para seguir viviendo.


Pasó unos escasos 5 minutos en el pasillo mientras dentro de la habitación los médicos intentaban salvarle la vida. Unos escasos minutos que le trajeron la noticia más desgarradora jamás imaginada. 


- Lo siento chico, no ha sobrevivido. Cuando hemos llegado ya no había nada que hacer. No ha respondido a la reanimación cardiopulmonar.


Los médicos fueron saliendo poco a poco  de la habitación hasta que dentro de ella solo quedó el cuerpo inerte de Evelyn. Dimitri entró arrastrando los pies y con los ojos llenos de lágrimas. Estaba tan guapa, tan perfecta. No podía haberse ido, no. Se apoyó contra la pared, pues sus piernas no era capaces de sostenerlo. Poco a poco fue resbalando hasta llegar al suelo. Le faltaba el aire, no podía respirar y los ojos le escocían de tanto llorar. Cuando alzó la vista vio un aparato. Una máquina que conocía por las series de televisión. Era un desfibrilador. 


Se levantó del suelo y corrió hacia la máquina. Recordaba cómo la usaban los médicos de aquella serie tan famosa que su madre veía en Rusia. Así que hizo lo que había visto. Abrió la blusa de Evelyn y encendió la máquina. Miró por un instante las planchas y acto seguido miró a Evelyn. Tenía que intentarlo. Cerró los ojos y dejó caer las planchas en el pecho de Eve. Un pitido sonó en la el electrocardiógrafo. Volvió a poner las planchas en el pecho de Eve y esta vez, fueron dos pitidos los que sonaron. Subió la carga de 300 a 400 y volvió a posar las planchas en su pecho. Esta vez la máquina lanzó un pitido, tras un par de segundos de silencio, dos pitidos más. 


- Vamos, vamos. Por favor....




"- He tomado una decisión.


Acto seguido un sendero apareció frente a ella. No era el famoso camino de luz blanca que solía decir la gente. Era un sendero en mitad del bosque. Una cálida brisa la abrazó con cariño. Siguió caminando hasta encontrarse con un sauce llorón. Cruzó entre las ramas y las flores de aquel sauce y una luz la cegó por un momento. ¿Habría llegado a su destino? "


Cuatro pitidos, silencio, seis pitidos, silencio, ocho pitidos... Y de repente el monitor empezó a pitar con normalidad.






¬ ¡Feliz año nuevo a todos! :)

2 comentarios:

  1. Por segundos pensé que en serio se moría y que Dimitri se iba con ella .___________.

    ResponderEliminar
  2. Tienes que seguir escribiendo :)
    Yo también pensé que se iría!

    Saludos!

    ResponderEliminar

¡Hola! Acabas de decidir garabatear algo para mi, espero de todo corazón que te haya gustado mi blog.
¡Un besito! ¡Y gracias por pasar!
(¡Ah! Y no olvides que puedes quedarte en el desván ^.^ )