#250

Nos pasamos la noche mirándonos de reojo, expectantes. He revivido tantas veces ese momento en mi mente.... Para mi era imposible asumir que alguien como tú se había fijado en alguien como yo, y más tarde descubrí que tu pensabas exactamente lo mismo. Para el mundo éramos unos desconocidos más, pero no era verdad, nos conocíamos, nos conocíamos muy bien. Habíamos pasado horas y horas hablando y de repente pasó, encajamos. Y no pudimos reprimir nuestros deseos y nos comimos a besos y a caricias con más complicidad de la que nunca había compartido nadie.