#348

Llegaron a su destino y nada más salir del tren con Evelyn en brazos y aún en coma, Dimitri alquiló un coche para ir al que sería su nuevo hogar, aunque la verdad es que poco tenía de nuevo. 


Tras tres horas en coche llegaron a la entrada de aquella destruida mansión. Era de piedra gris oscuro, tenía una fachada señorial llena de cristaleras y un porche de ensueño de madera blanca. Aunque ahora, gran parte del edificio estaba derruido. Cruzaron la negra valla oxidada y atravesaron un pequeño camino rodeados de rosales  marchitados. Tras unos pocos metros llegaron a la fuente que había justo enfrente de la entrada de la casa. Ver aquella imagen de cristales rotos y paredes destrozadas trajo una viva imagen a la memoria de Dimitri.


"Corría el año 1864. Pesadas nubes ensombrecían el cielo en señal de mal augurio. El día estaba llegando a su fin y con el la noche comenzaba. Empezó a llover con fuerza y una de las ventanas de la gran biblioteca se abrió por culpa del viento. Dimitri atravesó la habitación e intentó cerrarla, pero la corriente era más fuerte que él. Quiso llamar a Anna, pero su boca no emitió sonido alguno. 


En el exterior de la casa, justo en las vallas, había un grupo de gente con antorchas. La casa estaba llena de sonidos salvajes emitidos por el viento contra los cristales. Algunas tejas se desprendieron del techo y estallaron al llegar al suelo. Dimitri sintió que le faltaba el aire. Sabía que aquello iba a suceder tarde o temprano. La lluvia le azotaba la cara y tuvo que cerrar los ojos por un momento. Cuando pudo volver a abrirlos vio que había un carruaje justo delante de la casa. El sonido de los cascos contra el suelo sonaba por encima del de la lluvia. El cochero sostenía su chistera con una mano y las riendas del caballo con la otra.  Del interior del carruaje salió un hombre joven con una capa gris y una capucha que cubría su cabeza. Dimitri soltó la ventana y corrió escaleras arriba.  


- ¡Ya están aquí, rápido, al bosque! ¡Saldremos por la puerta de la cocina!


Anna corrió en camisón cogida de la mano de Dimitri.


- ¡Vamos, vamos date prisa! -gritó él.


Justo cuando llegaron a la cocina, la puerta que daba a la parte de atrás de la casa, y por la que pensaban escapar, se abrió de par en par. La lluvia entró arrastrada por el viento. Dimitri vio una silueta, no hacía falta que dijera nada, sabía exactamente quién era. Anna salió corriendo por el pasillo, pero Dimitri no se movió ni un centímetro. Daba igual correr, estaban rodeados. Sabía que era cuestión de segundos que le faltara el aire. Cerró los ojos y escuchó un disparo."


Dimitri no quería recordar más, habían pasado casi 150 años desde entonces, aunque aquel recuerdo aún lo atormentaba por las noches. Entró en la casa con Evelyn en brazos, subió las escaleras y entró en la que antiguamente era el dormitorio principal. Los muebles estaban llenos de polvo y recuerdos. Cruzó la habitación y metió a Evelyn en la cama. Ahora tenía una gran cicatriz en la cara, pero eso no menguaba su belleza. Tenía el pelo corto, aunque le había crecido mucho desde la operación. Le acarició suavemente la mejilla y sucedió lo que tanto tiempo llevaba esperando, Evelyn despertó. 


- ¿Di... Dimitri?- dijo intentando incorporarse.
- Sí, soy yo cariño. No te levantes, no sería bueno para tu salud.
- ¿Qué ha pasado? ¿Dónde estoy?
- Has estado 2 meses en coma. Fue culpa mía, no debía haber jugado aquel maldito partido y... por culpa de eso acabaste en el hospital. Jeremy... él te quiso matar, y por eso estamos aquí ahora. Hemos salido de la ciudad.
- Sí, lo recuerdo... Aún tengo la sensación de sentir sus manos en mi cuello.- dijo acariciando su garganta.- Pero, ¿dónde me has traído?
- A casa.- dijo Dimitri. Tenía que decírselo, era ahora o nunca.
- ¿A casa?
- Sí. Te he traído a casa Anna.
- ¿Quién es Anna?
- Tú. Es una larga historia amor, pero te la contaré con calma, no te preocupes. Lo primero que tienes que saber es, que tú y yo, somos almas perdidas.




¬ Ésta es la última entrada que publicaré sobre ellos y es que, como ya había dicho en twitter y facebook, tengo un proyecto muy especial para ellos. Voy a terminar su historia, pero lo haré en lo que será mi próximo libro :)