Te echo de menos.
Quizás no sea de manera física, pero si psicológicamente, pues extraño tu olor y tu voz. Bueno, a quién quiero engañar, extraño que me cojas, me hagas rabias o me hagas reír con tus tonterías de niño pequeño. ¿En qué pienso? En nada.
No puedo decir que no piense, porque si que pienso, sobre todo en ti.
No puedo decir que he olvidado la manera en la que me agarrabas de la cintura y me acercabas a ti.
Pero quizás, esto de echarte de menos sea temporal, porque, si nos paramos un instante a pensarlo seriamente, todo es temporal, todo tiene un maldito final.
No me gustan nada los finales... y es que tengo que decir que ni siquiera dejo que una canción termine del todo.
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También odio los finales, ahora ultimo trato de no pensar en ellos, pero sé que están ahí esperando para aparecer a escena :/
ResponderEliminarsaludos ♥